Día tras día me voy dando cuenta de que mi vida no es mas que una historia, una historia mas que contar, una historia que atraerá a unos y desagradara a otros, un historia con un principio y un final.
Y es que lo mejor sería vivir sin preocupaciones, ser feliz, querer y ser querido...Querer y ser querido, si, se dice fácil pero hay mas que eso. Ojalá todo el mundo pudiese ser querido y correspondido de la misma forma que el quiere a alguien, pero a veces no todos recibimos ese cariño de la misma forma en que nosotros lo damos a otra personas y eso es lo que mas duele. Me gustaría poder despertarme día a día sabiendo que nadie me va a fallar en esas 24 horas, sabiendo que no voy a pasar sola ni un momento del día, que la gente a la que quiero va a estar ahí y me va a querer como me lo merezco, pero en cambio todos los días siento que algo falla, no sé si soy yo o son los demás, siento que estoy en un pozo sin fondo, siento un vacío en el pecho y me pregunto que estaré haciendo mal, que hay que hace para llenar ese vacío, que puedo hacer para curar esas heridas.
Estoy perdida si, pero por el momento no hay brújula que me oriente.
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